FEBRERO - VIAJES ENTRE LINEAS Y TIEMPOS

   AVISO: como siempre el post es Largo. Muy Largo. Ya me viene de marca, me gusta soltar lastre, enrollarme, vomitarlo todo y emocionarme con ello. No me guardo nada, me dejo la melena suelta y si me queréis acompañar BIENVENIDOS =) y si no pues no pasa nada, nadie os obliga.
   Espera, ¿qué es eso a tu espalda? ¡bang!¡bang!
   ¡¡Nada, es bromaaa!! 

Contenido del mes: Mecanoscrit del Segon Origen, Ether, Innocent, FruitsBasket, Ekhö y Las Hijas de Tara

Ojo, edición de "El Periodico" de hace mil
 Uno de los propósitos de año nuevo era leer más y, cosas de la vida, una amiga mía me había mandado un reto de lectura anual (cada mes un tipo de lectura distinta) que no pensé en tomarlo en serio ni seguirlo al 100% pero como impulso me ha dado la vida. En enero, para empezar, me leí la biografía de Jane Austen, debido a un encontronazo con una revista del National Geographic que hablaba de ella. Este mes tocaba un clásico de nuestra literatura, que a mi margen de libre elección he aprovechado para releer un libro de cuando iba a la ESO que me apetecía volver a experimentar. 
     Así pues, todo empezó con Mecanoscrit del Segon Origen de Manuel de Pedrolo, y me he sorprendido a mi misma con la cantidad de cosas que he leído después, todo muy variopinto. Y esque tras acabar esa novela de literatura moderna tenía sed de más y quería distraer mi mente de los conflictos en los que me había hecho pensar.

Mecanoscrit del Segon Origen 
    Me he encontrado inmersa en las páginas de Pedrolo con ansia y rabia. Una tierra en ruinas donde ningún mamífero ni humano ni animal sobrevivía, excepto dos: Alba y Dídac, 14 y 10 años, vecinos de toda la vida en un pueblo y ahora únicos vestigios de la humanidad. Los ves crecer, convivir y sobrevivir. Te hace pensar, bastante sobre nuestra manera de ser, de comportarnos y de avanzar. Es ameno y crudo. No recuerdo nada de cuando me lo leí en la ESO, de hecho lo único que recuerdo es que aparecían unos Ovnis al principio de la historia y que hice un dibujo de eso como portada del trabajo de lectura. Recuerdo que para mi era pura ficción, fantasía en un mundo conocido, un futuro alterno. Ahora, años más tarde con ojos más maduros estamos más cerca de un futuro apocalíptico de lo que jamás hubiera imaginado mi Yo de 12 años y aunque la humanidad no sea aniquilada por causas alienígenas (ahora están más de moda los zombies) sí que estamos a dos pasos de ver desfallecer nuestro alrededor.
    Lo primero que me fascinaba era el mundo. Uno pensaría en fuegos, destrucción, polvo, desolación... pero he te aquí que misteriosamente sólo había dejado de funcionar. Todos muertos, todo parado, sin luz, sin energía vital. Sin coches, sin radio, sin neveras, sin tiempo. Me fascinaba la quietud ya no solo en el primer momento sino años después del cataclismo cuando te explican que ya no huele a cadáveres, que ya no hay contaminación, que la naturaleza avanza salvaje en algunas zonas y que todo lo demás sigue en el mismo sitio donde se dejaron caer el día D como ruinas de otra era. Sin más apariciones extraterrestres en toda la historia ¿qué sentido tenía el ataque? ¿acaso era un "favor" al mundo?
    Lo segundo que me enganchó fué la naturalidad. Los personajes se cuidan entre ellos, se respetan mutuamente y no se juzgan por el color de piel, el desnudo o la edad. Se adaptan a la situación con resignación y entereza. A la par de todo esto me inquieta la capacidad de la protagonista, Alba, la más mayor de ambos, de racionalizar. Es una chica increíblemente pragmática, realista, sensata e ingeniosa. En su escritura Manuel de Pedrolo probablemente quería hacer de Alba la nueva Eva de la humanidad, dotándola de cierto puritanismo, resaltando su virginidad, haciéndola tan pura de espíritu que te describe como se le transluce una camiseta sin ningún tipo de erotismo detrás, ni malicia ni pecado, solo sensual normalidad pero a la vez es la que lleva la voz cantante. Tengo sentimientos encontrados con esta Alba. Me encanta ver una "heroína" valiente, sagaz, inteligente pero me resulta en cierto punto manipuladora... ella tiene claro que el deber que tienen ella y Dídac será el de repoblar la tierra y todo lo que hacen por sobrevivir es con ese propósito de futuro, aunque Dídac no es plenamente consciente y su deseo por Alba se despierta con la edad no por desear repoblar el mundo. Entonces me encuentro en esa encrucijada de ¿PERO POR QUÉ? ¿Qué necesidad hay de repoblar el mundo? Y pienso que no deja de ser una novela de los años 70 y somos unos seres egocéntricos que no concebimos un planeta sin nuestra huella encima.  ¡Sorpresa! no termina exactamente como tenían planeado... pero como el libro termina ahí te quedas en ascuas de saber exactamente cómo sigue la trama. Te da a entender que años más tarde la civilización encuentra los cuadernos escritos sobre Alba y Dídac, no están escritos por ellos sino por una tercera persona.... ¿Quién? no se sabe ¿Es ficción o fueron hechos reales? ¿Será Alba de verdad la nueva Eva?
    ...
    Y nunca se sabrá.
    Me ha fascinado la lectura por esas cosas y por las experiencias que los mismos personajes van viviendo, te hacen reflexionar de pasada muchos temas que, a día de hoy, siguen siendo motivo de polémica, lucha, guerras y luchas por el progreso... Y eso que se escribió en los años 70. El arte, la Cultura, las tradiciones ¿qué guardaríamos para la posteridad? ¿Seguiríamos creyendo en las mismas cosas o sólo las transmitiríamos como algo del pasado, como quien habla de cuentos? ¿Haríamos registros de daños y perjuicios para que los ojos del futuro vieran y entendieran de dónde venimos, hacia dónde vamos? ¿Seríamos capaces de no juzgarnos por el sexo y tratarnos con igualdad y respeto? ¿Que no importe el color de piel? ¿Que no importe el apellido o el orden de ellos? ¿Hasta que punto nos cambia un hecho traumático y nos moldeamos a nosotros mismos en pos de seguir o rendirse a las fuerzas de la naturaleza? Verse en la impotencia de alimentarse o curarse bien y tener que aprender a cultivar, aprender qué hacer cuando estas malo... Apañarte, ingeniarte, y la fuerza de pensar que lo vas a lograr que habrá más futuro, y luego... No saber de verdad si es tu último día en la tierra. ¿Cómo sería despertar un día y ver que el mundo entero esta en silencio, sin electricidad, sin vehículos, sin personas, sin saber si queda alguien ahí fuera ni si está sano, salvo y cuerdo?
    ¿Como sería reiniciar el mundo?

Ether, Innocent, Fruits Baskets
    Tras aquello me fui en busca de algo más light: Ether, un cómic de Matt Kindt y David Rubín donde esperaba reírme un rato de aventuras fantasiosas y acabé enfrascándome de nuevo en una realidad alternativa donde confluyen la fantasía y la realidad... Una lectura amena, dinámica y con una pequeña vuelta de tuerca que te deja con ganas de más... Seré yo que salía de una lectura más profunda o será que me hago mayor y empiezo a ver mensajes en todas partes sobre la existencia y nuestra manera de vivir la vida, nuestros motores, nuestra eterna búsqueda del tesoro, de la verdad, de la liberación.
    (Si sueno a chino es que me he ido a otro nivel de reflexión jejeje)
    Y ya sedienda de lectura volví a la tienda a comprarme el segundo tomo de Ether... Sumé un par de mangas sobre la revolución francesa desde el punto de vista de los verdugos (Innocent) y la necesidad de justificar los actos propios para sentirse libre y... Y hasta que punto somos como somos o nos moldean para que seamos alguien. Me salgo de una para meterme en otra historia de telón.... Me encantan, en verdad me encanta que me hagan petar la cabeza. Adoro darle vueltas a las cosas, por simple que sea me inspira. Vaya que si me inspira que he recuperado la chispa de una historia que tenía aparcada en proceso de estructura narrativa sobre temas así "rompecabezas".
    En fin, para cerrar el grifo me compré un manga de mi tierna adolescencia, mi primer manga después de Sakura Card Captor... Creo... Fruits Basket. Y ya ahí me teletransporté a otro tiempo de mi vida y pensé que de alguna manera yo había intentado ser como esas chicas de los mangas... Amable, buena y compasiva, valiente pero miedica... ¿Sería la misma a día de hoy de haber leído otras cosas? Bueno, de hecho sí que he leído otras cosas. De por sí ya era buena, compasiva y miedica pero a mi nadie me veía adorable ni simpática. También era una antisocial, recuerdo lo mucho que me costaba entablar conversación con la gente, siempre reservada, tímida y empollona, recuerdo la amiga que en su extrapolación a mi me dejaba mangas de todo tipo y compartíamos charlas frikis... Recuerdo que ella quería ser escritora y yo que no me veía capaz de llegar a ser "importante" pensé: yo también quiero escribir algo... quiero ser más que una chica, más que una mujer, más que una estudiante o una ama de casa... quiero plantar mi árbol, escribir mi libro y tener un hijo a quién transmitir todas las cosas que me gustaría que el mundo viera normalizadas, todo lo justo, todo lo sano, todo lo respetuoso... La cuestión es que me siguen gustando los mangas de muchos tipos y tal vez el hecho de leer historias varias en manga, prosa, cómics o novelas y admirando sus autorxs e ilustradorxs he querido no estancarme y buscar ser más yo sin importar qué piensen los demás o cómo me vieran desde fuera... He buscado sentirme libre por mi misma sin depender de lo que esperan de mi o quisieran de mi o para mi, no he querido complacer a nadie más que mi misma... Aunque a veces es difícil ignorar las masas.

Ekhö y Las Hijas de Tara
    Llega el fin de mes y me estoy cansando de escribir aunque no me he cansado de leer. Sinceramente hacía MUCHO, pero que MUCHO TIEMPO, que no bebía tantas letras con tanta tranquilidad y desahogo, ha sido como redescubrir un hobby perdido y me está gustando lograr mantener el ritmo. Sólo he parado de leer para escuchar música, comer, dormir o hacer cosas aparte y vida común en casa.
    Como quedaban unos días antes de que terminara el mes y ya había cumplido con la lectura del reto me decidí a releer los cómics de Eckö, tengo solo los dos primeros y me gustaría seguir la colección. Me encantan los albums franceses, la narrativa de sus viñetas, la aplicación del color, especialmente si es acuarela, o técnica tradicional y la cantidad de detalles que se dibujan aunque pasen de largo a los ojos de un lector rápido y ansioso. Disfruté como una niña traviesa leyendo Ekhö, entreteniéndome en los detalles de diseño de personajes y la aerodinámica de sus movimientos... En fin, como una niña. Leyendo Ether también me he recreado mirando páginas aunque no es mi estilo de dibujo se me ha hecho ameno y fascinante el mundo de "ether" y sus distintos parajes y animalicos (o bestias). 
Nueva Edición con Ilustración de
 Gabriel Barbabianca
    Ahora mismo me encuentro enfrascada en otra relectura: Las Hijas de Tara de Laura Gallego, mi escritora favorita de la adolescencia, y que sigo queriendo con mucho cariño por todas las lecturas que me han acompañado desde los 14 años y me han hecho ver el mundo desde otro prisma disfrutando de una fantasía rica con personajes tangibles, con problemas reales, empoderamiento, discriminaciones y evolución. Adoro sus personajes, hombres, mujeres, feéricos o humanos, encantados, buenos y malos... (pero hablar de ella me llevaría un post entero a parte.) De momento y siguiendo la tónica de los fines del mundo estoy releyendo esta novela que leí en su dia con unos 16 años y me apetece volver a leerla ya que hay detalles que no recuerdo bien.

    Pero, eh, librazo. Tecnología vs Naturaleza (muy muy muy muy resumidamente y ni por asomo sólo tecnología ni sólo naturaleza).

    Con esto y un bizcocho... hasta otro día a las ocho.

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